Un simposio celebrado en el Hospital Universitario de Badajoz, en el marco del Foro CYTED, del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología, reúne en Badajoz a expertos mundiales en medicina de precisión, procedentes de estas comunidades, de varios países iberoamericanos y de Italia y Portugal
El simposio ha servido para compartir los resultados del proyecto Medea, experiencia pionera de implementación universal de la Farmacogenética en los Servicios Públicos de Salud, que ha permitido genotipar a más de 6.500 pacientes extremeños, y ha constatado la posibilidad de anticipar reacciones adversas a los medicamentos y personalizar los tratamientos
Tras la elaboración por el Ministerio de Sanidad del catálogo común de pruebas farmacogenéticas y la publicación de la Base de Farmacogenética de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), las comunidades autónomas tienen ahora el reto ahora de incorporar la práctica clínica a la farmacogenética
La utilización de la información genómica en la prescripción de determinados medicamentos es uno de los grandes desafíos de futuro para todos los sistemas sanitarios, pues el 28% de los ingresos hospitalarios están provocados por efectos adversos de los fármacos relacionados con la genética
Un simposio celebrado en Badajoz, en el marco del Foro CYTED, del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología, reunió ayer en Badajoz a expertos mundiales en medicina de precisión. Organizado por la Red Iberoamericana de Farmacogenética y Farmacogenómica RIBEF, el Instituto de Investigación Biosanitaria de Extremadura INUBE, la Sociedad Iberoamericana de Farmacogenética y Farmacogenómica y el Servicio Extremeño de Salud, el encuentro ha servicio para debatir sobre la implementación de la farmacogenética en la práctica clínica en Iberoamérica y Europa, así como para presentar los resultados del proyecto Medea, experiencia pionera que se ha desarrollado en Extremadura y que servirá de base para la progresiva aplicación de la medicina personalizada en España, la cual empezará a producirse a partir del próximo año 2025.
El primer paso para ello ya está dado y ha sido la elaboración por el Ministerio de Sanidad del catálogo común de pruebas farmacogenéticas y la publicación de la Base de Farmacogenética de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). A partir de este momento, el reto, inminente y al mismo tiempo complejo, es su incorporación a la práctica clínica dentro del Sistema Nacional de Salud. Las comunidades de Extremadura, Valencia y Canarias van a marcar el camino para ello y expertos procedentes de estos territorios han debatido junto a colegas de otras comunidades, y otros especialistas mundiales procedentes Latinoamérica, de Italia y Portugal sobre cómo hacerlo y qué dificultades deben salvarse en el camino.
Para todo ello son de extraordinaria utilidad los resultados del proyecto Medea, una experiencia pionera de implementación universal de la Farmacogenética en los Servicios Públicos de Salud que se ha desarrollado en Extremadura y que ha permitido genotipar a más de 6.500 pacientes extremeños. Los resultados de esta experiencia han sido puestos en común en el simposio celebrado ayer y han constatado la posibilidad de anticipar reacciones adversas a los medicamentos y personalizar los tratamientos. En concreto, y en la cohorte de 6500 pacientes evaluados, en el 28% se identificaron reacciones adversas previas y en el 40% se sugirieron cambios en el tratamiento basado en el Informe Farmacogenético.
España va a ser el primer país del mundo en incorporar a la práctica de clínica la farmacogenética, algo que va a empezar a suceder a principios de 2025, aunque por el momento no se incluyen todos los fármacos, sino 65 y el catálogo común de pruebas genéticas afecta en un principio a 20 grupos de enfermedades. Ya solo el proyecto MEDEA la convierte en un país pionero en esta materia, pues no existe a nivel mundial ninguna experiencia de implantación de estas características.
Se trata además de un reto que es crucial para los sistemas sanitarios no ya de España, Europa e Iberoamérica, sino de todo el mundo, pues la tasa de mortalidad relacionada con efectos adversos a los medicamentos se ha duplicado en los últimos veinte años a nivel mundial y ya representa la sexta causa de muerte. Se estima que el 28% de los ingresos hospitalarios están relacionados con los efectos adversos de determinados fármacos y estos efectos adversos se relacionan a su vez con la genética (información genómica) de cada paciente. La personalización de los tratamientos, previendo posibles efectos adversos en función de la información genómica de cada paciente, puede salvar muchas vidas, además de servir para reforzar la sostenibilidad del sistema sanitario, restándole presión asistencial tanto en la atención primaria como en la especializada y hospitalaria.
Con la experiencia acumulada en Medea, la previsión de la Comunidad de Extremadura es poner en marcha este servicio a principios de 2025 en todo el ámbito del Servicio Extremeño de Salud. Ya cuenta para ello con toda la infraestructura necesaria, los profesionales, los circuitos, los sistemas informáticos, toda la tecnología y los laboratorios y, sobre todo, todo el conocimiento y la formación acumulados gracias a estos años de trabajo e investigación.
El simposio celebrado ayer ha sido el último de los seis encuentros que se han celebrado en el marco del Foro CYTED, que ha reunido desde el lunes, en Madrid y Badajoz, a más de 93 investigadores y clínicos especializados en medicina personalizada, procedentes de toda Europa e Iberoamérica (13 países), para debatir sobre la incorporación de la farmacogenómica a la práctica clínica en las diferentes áreas terapéuticas (oncología, cardiovascular, salud mental). Organizado por la Red Iberoamericana de Farmacogenética y Farmacogenómica RIBEF y el Instituto Universitario de Investigación Biosanitaria de Extremadura INUBE, con la colaboración del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología CYTED y la Agencia Extremeña de Cooperación al Desarrollo AEXCID, el Foro también ha servido de plataforma de encuentro entre sistemas sanitarios, academia y empresas para desarrollar procedimientos y herramientas para la implementación en Europa e Iberoamérica y la generación de proyectos de transferencia, así como para evaluar la relevancia del componente poblacional en la implementación de la farmacogenética y generar una propuesta para las poblaciones iberoamericanas.